Más tarde los Pieres fueron liberados, mientras Pedro se iba en su helicóptero. Mientras en la casa de Pedro, donde se encontraban Caro y Paula, entraron unos hombres armados.
Caro: ¿qué pasa acá?
XXX: ¿quieta no se mueva?, ¡Vamos!
En ese momento llego Hernán…
Hernán: ¿vamos?, ¿a donde vamos?, Señores soy Hernán Paz Fiscal de la Nación, y ustedes están detenidos.
XXX: Jaja.
XXX: ¡Alto Policía!, ¡Suelten las armas! (entrando varios policías armados).
Hernán: tienen derecho a permanecer en silencio, ¡llévenselos!
Caro: Nan, ¿eso quiere decir, que todo está bien?
Hernán: todo está bien, todo listo ahora les toca a ustedes, pueden entrar (hablando por celular).
En ese momento entraron Mariano y el Negrito, y ellas corrieron a abrazarlos.
Caro: Están sanos y salvos, ¡Cuenten!
Mariano: Todo salió bien.
Caro: ¿cómo reaccionaron, cuando vieron a Pedro?
Mariano: Se impactaron, el impacto fue profundo.
Negrito: Casi se desmayan
Caro: ¿y ahora que sigue?
Mariano: Ahora sigue una guerra declarada y abierta.
Negrito: ¿y Pedro, donde esta?
Caro: ¿queeeeeee?
Más tarde Paula se fue a su casa, mientras tomaba algo entraron Facundo y Guillermo.
Guillermo: ¡Farsante!
Facundo: ¡déjala papa!
Guillermo: ¡No!, no hay defensa posible para esta mujer Facundo, es la peor de todas.
Paula: yo soy la peor de todas, ¿entonces quien sos vos Guillermo?
En ese momento entro Pedro por la puerta…
Pedro: Llego la hora señores, llego la hora de que pasemos las cosas en limpio
Justo salía Tadeo de su cuarto, y Facundo lo abrazo…
Tadeo: ¿ya se amigaron?, ¿O siguen enojados?
Guillermo: Paula, ¡llévate a tu hijo de acá!
Paula: Claro que me lo llevo, no quiero que vea cosas desagradables, Tadeo vamos.
Tadeo: No mama y no me voy a ir, quiero saber que paso.
Facundo: No quiero que te preocupes, anda a tu cuarto y te pro meto que te cuento todo.
Tadeo: No se amigaron ¿verdad?, por eso se miran mal, como si se odiaran.
Pedro: Tadeo, trata de entender.
Tadeo: No entiendo, los mejores amigos hablan y se vuelven a hablar.
Pedro: Tadeo; las cosas no son tan simples como queremos, lamentablemente no
Facundo: Tadeo, todo va estar bien. ¡Te lo prometo!
Tadeo: No, ustedes me van a mentir otra vez, se van a pelear.
Paula: Tadeo, estas cosas se arreglan entre grandes, vamos a tu cuarto.
Tadeo: Este problema tambien lo tengo que arreglar, los quiero a los dos, vos me prometiste que íbamos a ser amigos para siempre.
Pedro: y yo voy a cumplir con esa promesa, yo tambien te quiero y sos lo mas importante para mí.
Tadeo: ¿si me quieren, porque se pelean?
En ese momento Tadeo noto que Facundo, tenía una mancha de sangre en su camisa.
Tadeo: ¿qué te paso?
Pedro: Déjame que te explique.
Tadeo: No quiero que me expliques nada, son unos mentirosos (yéndose)
Guillermo: ¿que queres con todo esto?, porque sigo sin entender tu estrategia.
Pedro: El único que merece una explicación es mi hijo, y aunque el mundo se oponga, se la voy a dar.
Facundo: Mi hijo no te quiere escuchar.
Pedro: No es tu hijo.
Paula: ¡Pedro!
Guillermo: ¡te vas arrepentir!
Pedro: Vaya, cada cual cuida su sangre, pero te advierto una cosa Pieres, yo voy a luchar por la mía, por la sangre de los Alfonso
Guillermo: Sigues con esas acusaciones, sobre la muerte de tu Padre.
Pedro: vamos a ver como hacen para probar, que no tuvieron nada que ver con la muerte de mi padre, y con el intento de homicidio mío,
Guillermo: se necesitan pruebas concretas.
Facundo: Estas haciendo una acusación, muy delicada Pedro
Pedro: ¡hipócrita!
Facundo: yo no sé de qué estás hablando
Pedro: yo de que sabes mas, pero si se cuales fueron los motivos, mi padre tenía información sobre un caso, que te involucraba demasiado (mirando a Guillermo),
¿Es cierto Guillermo?
Paula: ¿exactamente en qué caso?
Pedro: tu suegro tenía varios negocios sucios, pero los detalles me los reservo para otro momento.
En ese momento Guillermo se fue…
Pedro: Veo que nada mas, quedamos los grandes amigos.
Paula: Pedro, creo que es mejor que te vayas, no es el momento para hablar las cosas, Tadeo nos puede escuchar.
Facundo: Paula tiene razón, al menos que quieras seguir lastimando a Tadeo, además como veras, no estoy en condiciones de nada.
Paula: ¿vos lo lastimaste?
Pedro: ¡Sí!, ¿queres que me vaya, así le curas la herida?
Paula: Tampoco, me hables así.
Facundo: Esto parece una pelea de enamorados, por cierto no pareces extrañada de ver a tu amor resucitado, ¿desde cuándo andas con él? (empujándola)
Pedro se metió en el medio, en ese momento.
Paula: No, no, no. (Separándolos)
Pedro: Eso no es cierto, ¿cómo te atreves a mirarnos, a los ojos?, ¿qué mentira le dijiste a Paula?, ¿que teníamos vos y yo, un pacto sobre ella?
Facundo: Siempre dijimos que Paula, era sagrada y vos en la cárcel me pediste que la cuide, si te pasaba algo.
Pedro: Te pedi que le digas, que la amaba.
Paula: Bueno Basta, creo que hay algo muy importante que aclarar, ¿a vos te dieron un tiro?, y vos estabas ahí Facundo ¿qué paso?
Facundo: Te lo dije mil veces, estaba amarrado, golpeado y sangrando.
Pedro: ¡No mientas Facundo!, yo te vi en muy buen estado de salud, antes de que me pegaran el tiro.
Facundo: yo tambien estaba muy mal.
Pedro: que poco hombre sos Facundo, vos lo hiciste por ella, no tuviste el valor de pelear por ella, por eso me mandaste a matar.
Facundo: No se dé que hablas...
Paula: ¿Porque lo hiciste Facundo?
Facundo: Te juro que yo no sé, de que me están hablando.
Pedro: ¡Sos un mentiroso! si hubieras aceptado algo, reconocido algo yo te creería, pero no sos peor de lo que imagine, mucho peor se nota que nunca conocí a Facundo Pieres,
Paula: Pedro anda, Tadeo después te va a ver.
Pedro: No Pienso dejarlo, con este asesino.
Pedro lo pensó y se comenzó a ir…
Facundo: ¿así defendeos lo que tanto queres yéndote?, ¿mintiéndole a Paula, y dándonos la espalda?
Paula: ¡Facundo, por Dios!
Pedro: Me voy Por Tadeo. Porque no quiero que siga sufriendo. Muy pronto vas a saber se mi Facundo, muy pronto,
En ese momento Pedro se fue de ahí…
Facundo: ¿dudas de mí?
Paula: antes tenía el beneficio de la duda, ahora tengo la certeza de que lo traicionaste, ahora entiendo porque te casaste conmigo y porque aceptaste a Tadeo como tu hijo
Facundo: Lo hice porque te amaba, porque te amo Paula.
Paula: Nunca me amaste, si me hubieras amado hubieras hecho cualquier cosa por Pedro, lo hubieras rescatado.
Facundo: yo nunca te obligue, a casarte conmigo.
Paula: Te aprovechaste, porque sabias que le quería dar un futuro a mi hijo, y no tenemos más nada que hablar,
En ese momento Paula se fue a lo de Pedro, todos se lo negaban porque él estaba escondido.
Paula: ¡Pedro!, ¡Pedroooooooooooooooooo!, por favor necesito verte, necito verte a los ojos, necesito decirte que te amooooooooooooooo Pedro, te amo y quiero estar con vos por favor.
Pedro salió de su escondite y se paro frente a ella…
Paula: Necesito estar con vos, necesito que me abraces, que me digas que me amas todos los días.
Pedro: yo tambien te necesito mucho, como el aire.
Paula: ¿Por qué no nos vamos con nuestro hijo?, Pedro por favor, olvídate de esa venganza, porque nosotros podemos robarle a la vida, la felicidad que nos robo, por favor.
Pedro: ¿Por qué no me entendes?, yo necesito hacerlo.
Paula: Porque te amo, y cuando vine a esta casa estaba buscando al Pedro que era divertido, alegre.
Pedro: Ese Pedro murió hace 5 años,
Paula: no, no, no ese Pedro esta acá, estas acá podemos irnos lejos, olvidarnos de todo y de todos y ser felices.
Pedro: No se trata de venganza, se trata de Justicia, mataron a mi papa, me robaron mi vida, ahora tienen a mi hijo, no le puedo dar la espalda a la realidad, ¿quién sino yo para hacer justicia, Paula?
Paula: ¿Justicia?, ¿y el amor?, ¿donde quedo el amor?, es que no entiendo como no lo ves si esta acá, lo único que tenes que hacer es tomarlo.
En ese momento Paula se fue, dejando a Pedro Pensativo…
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